¡Hola a todos!
Esta semana, antes de publicar la
entrada sobre la sesión de Carlos y la de Luz, respectivamente, he decidido
contaros un poco más sobre mi relación con las lenguas en general.
Desde pequeñita, en mi casa
siempre se ha hablado gallego, por lo que
fue una de las primeras lenguas con las que estuve en contacto. Sin
embargo, cuando tenía 3 años y llegué a la guardería casi todo el mundo,
incluidas las profesoras, hablaban español, por lo que yo también empecé a
hablarlo de manera inconsciente. Aún
así, mi relación con el gallego sigue estando muy presente: hablo
gallego con mi familia en general y con mucha gente de mi círculo. De hecho, en
un grupo de personas donde 3 hablen español y 2 hablen gallego, yo puedo
cambiar de idioma para dirigirme a ellos respectivamente, sin que esto suponga
un problema para mí, por lo que mucha gente se queda asombrada con el dominio
que tengo de dos lenguas y todo gracias a que en mi casa siempre se ha hablado
(ahora mismo me estoy dando cuenta de que podría haber escrito el blog en
gallego, pero bueno…).
Continuamos con mi relación con
las lenguas. Cuando tenía 6 años, en inglés entró en mi vida. El primer día de
clase nos enseñaron una o dos frases de presentación y a los pocos días yo ya
me sabía de memoria los nombres de los personajes del libro: Lindy Lion, Polly
Parrot, Mickey Monkey… Yo estaba cada vez más entusiasmada al aprender nuevas
palabras en un vocabulario totalmente nuevo para mí. Poco a poco fue llegando
la gramática, con los tiempos verbales, los pasados, las pasivas, el estilo
indirecto, los odiados phrasal verbs,
las condicionales… y hasta hoy. El inglés sigue muy presente en mi vida,
aquella niña que se emocionaba por aprender nuevas palabras, ahora es graduada
en Traducción e Interpretación, tiene varios títulos de la Escuela Oficial de
Idiomas, está preparando el CPE (Cambridge Proficiency Exam) y algún día será esa profesora de inglés que despierte el interés por la lengua en sus alumnos.
Pero no solo el inglés marcó mi
vida. Cuando empecé 1º de ESO, tenía que escoger entre varias optativas, pero
yo no me lo dudé un momento: mi optativa sería francés. Nueva lengua, nuevo
vocabulario, nuevas expresiones…¡todo me resultaba emocionante! He de decir que
he tenido mucha suerte, puesto que a lo largo de todo mi aprendizaje solo me he
encontrado con profesores maravillosos que han sabido enseñar y transmitir su
amor por el francés. Esta lengua estuvo presente en mi vida durante toda la ESO,
el Bachillerato y durante toda la carrera. Reconozco que quizá ahora sí que lo
tengo un poco oxidado, pero de este año no pasa que retome su estudio.
Aún no hemos acabado… Cuando
llegué a 3º de carrera necesitaba aprender cosas nuevas. No es que dominase a
la perfección el inglés y el francés (de hecho aún no lo hago), pero necesitaba
aprender algo nuevo y salir de la monotonía. Entonces me apunté a una academia
de alemán y recordé mis comienzos en Educación Primaria, cuando con aprender
solo 2 palabras nuevas cada día ya volvía contenta a casa.
Y por último, pero no menos importante,
la lengua de signos. Me considero una persona muy empática y siempre intento
ponerme en el lugar de los demás, quizá porque en mi guardería había un niño
ciego y este hecho hizo que, desde muy pequeñita, me diese cuenta de que hay
que ponerse en el lugar de los demás para comprender su situación. ¿Qué pasa si
un día me encuentro con una persona sorda por la calle perdida y necesita mi
ayuda? ¿O si es al revés y soy yo la que necesita su ayuda? Ver el telediario
signado me fascinaba, por eso no dudé ni un momento en apuntarme a un curso de
lengua de signos, del que os hablo precisamente aquí.
¡Y esto es todo de momento! Tengo
que decir que a mis 22 años las ganas de aprender están igual de presentes que
cuando empezaba a pronunciar mis primeras palabras en inglés, por lo que en los
próximos años seguramente intente perfeccionar alguno de los idiomas que ya sé
y aprender otros nuevos. ¡Me encantan los retos!
Gracias a todos por leerme :)
Me fascina tu entusiasmo, ojalá consigas transmitírselo a tus futuros alumnos, creo que es lo más valioso que les puedes enseñar. Gracias por tu entrada.
ResponderEliminar¡Hola Adriana!
EliminarMuchas gracias por tu comentario y, como no, por tus halagos.
¡Un saludo!
¡Hola Bea!
ResponderEliminarQuiero destacar dos aspectos de tu entrada:
1. Me parece increíble tu forma de alternar gallego y castellano con tanta naturalidad, y esa facilidad para adaptarte a la persona con la que hables. Ojalá me pasara a mí lo mismo...
2. ¡Los phrasal verbs! Y taaaan odiados... Ojalá hubiese una manera para que se nos quedasen la mayoría de ellos fácilmente... Tendré que preguntarle a Luz si existe algún método o actividad...
Me gustó mucho de tu entrada tu motivación por aprender y tu interés en ayudar a los demás. Creo que esto será maravilloso cuando seas profesora (¡esperemos que pronto!)
¡Nos leemos!
Muchas gracias por tu comentario, Damián y por todas las cosas positivas que me escribes :)
EliminarEn cuanto a los phrasal verbs, como estudiante de inglés no te puedo decir ningún truco, pero lo que sí te puedo comentar es que muchos de ellos no se emplean diariamente, así que quizá deberías centrarte solo en aquellos que realmente se usen.
¡Un saludo! :)
Hey, Bea!
ResponderEliminarComparto totalmente ese entusiasmo y esa manera de enfocar el aprendizaje de lenguas... El aprender cada día una palabra nueva y que eso te ilusione tanto y sea algo tan novedoso. Yo también lo veía así cuando era pequeñita y empecé con el inglés, y por eso me llama tanto la atención que mis alumnos lo vean, hablando mal y acabando pronto, como un coñazo. Creo que es lo más importante que debemos transmitirles, más que gramática, vocabulario o las tan manidas competencias!
Keep it up!
Ale
¡Gracias por tu comentario, Ale!
EliminarMe gusta ver que alguien esté de acuerdo conmigo y, además, que también busque transmitir a sus alumnos su amor por los idiomas y sus ganas de aprender más que millones de estructuras gramaticales y hojas enteras de vocabulario. Con esto no quiero decir que estos aspectos no sean importantes, sino que hay que saber cómo transmitirlos de una manera útil y motivadora.
¡Gracias por leerme! :)
¡Wow! Y luego dicen que yo hablo muchas lenguas. Que maravilla leer todo lo que has hecho y como poco a poco fuiste adquiriendo lengua por lengua. He de decir que la parte que más me impresionó es la de la Lengua de signos. Yo tuve una signatura en la carrera de Lingüística de Lengua de Signos. Fue una de mis asignaturas favoritas (y mi Matrícula de Honor) y aprendí muchísimo la verdad. De hecho tuve la oportunidad de tratar con niños con discapacidad auditiva en un colegio de Vigo y fue una experiencia que desde luego me llegó dentro. Espero que algún día podamos mantener una conversación en lengua de signos (quién sabe, quizás en la siguiente beca que pidamos me puedes ayudar usando la LSE).
ResponderEliminarGracias por compartir tus experiencias.
Un saludo